Llevo años puliendo una habilidad: saber desconectar las distintas partes de mi vida para poder disfrutarlas a fondo. No siempre sale perfecto, pero cuando funciona, marca la diferencia.
Para mí es como tener varios compartimentos en la cabeza. Abro solo el que necesito y dejo que, de vez en cuando, se mezclen ideas. Es una forma de descompartimentar cuando hace falta. Así dejo el trabajo en su sitio, trato mis aficiones como proyectos serios y, a veces, incluso puedo sacarles algo más.
Me gusta pensar que soy varios profesionales en uno. Soy informático, fotógrafo, uso impresión 3D y controlo de electrónica y bricolaje. Entender cómo funciona todo me permite arreglar cosas, aprovechar recursos y ayudar a otros. Alguna vez me han llamado MacGyver, y no me molesta: me gusta encontrar soluciones usando las herramientas y recursos de la forma más idónea para cada situación.
Me dicen que soy bastante apañado y que, por suerte, no dependo de nadie para sacar adelante lo que tengo en marcha. Ojalá eso se aplicara también a la parte económica, pero mientras tenga cubierto lo esencial, sigo adelante. Siempre hay algo que hacer o algún proyecto abierto.
Un día hice el ejercicio de mirar toda mi habitación con otra perspectiva, repasando cada objeto y cada rincón como piezas de un conjunto. Fui anotando cada hobby relacionado. La lista fue más larga de lo que imaginaba y acabó inspirando el nombre: Hobbieless. Es un guiño, porque no tengo un solo hobby, ni vivo solo para ellos. Todo acaba conectado de una forma u otra.
Compartimentar me ayuda a decidir qué toca en cada momento y disfrutarlo de principio a fin. Hasta organizarme se ha convertido en un hobby más. Así nació también la idea de Fix & Make: un espacio para compartir cómo transformo, reparo o reinvento cosas pequeñas y grandes, y cómo esa parte práctica se entrelaza con todo lo que pienso y escribo aquí.
Esta es la primera parte de una serie: Hobbieless — La forma de unirlo todo. Quiero contar cómo esta forma de organizarme sostiene mi forma de vida y me permite disfrutar cada parte del camino.